Puzles para niños: beneficios, trucos y tipos.
Puzles para niños, esenciales en su desarrollo.
¿Qué niño o adulto por aquí presente no ha hecho nunca un puzzle o rompecabezas? Los puzles para niños son un básico en la infancia y esenciales en el desarrollo, un juego muy recomendable por sus beneficios y que también proporciona diversión y momentos en familia.
Actualmente, existen puzles para niños con más o menos piezas, evolutivos que se adaptan a la edad de los niños, de madera, magnéticos, blandos, en 4d y un sinfín de variedades más que sirven para favorecer el desarrollo físico, emocional y cognitivo de los peques.
Desde que son muy chiquitines, los peques comienzan a absorber información de todo lo que les rodea y el juego es una de las mejores formas de que adquieran conocimientos, habilidades y destrezas. Hoy día existen puzles para niños desde 1 añito, con piezas enormes que no entrañan peligro alguno, blanditas y muy sencillas de unir para que vayan comprendiendo los patrones y entrenando su concentración y habilidades motrices.
Dejad que os enseñe primero los puzles maravillosos de Janod, os dejo el link al final del párrafo. Si accedéis veréis que tienen infinidad de puzzles de entre 9 y 40€.
Están clasificados por tipo de puzle (evolutivos, magnéticos, de madera o educativos) y por número de piezas, entre 20 y 2000.
Beneficios de los puzles para niños y mayores.
Sin duda hay muchos beneficios asociados con los puzles a nivel físico, emocional y cognitivo. Aquí hay algunos de ellos:
🧠 Mejora la memoria y concentración: Hacer puzzles necesita de mucha atención, paciencia y concentración. Nos ayudan a tener la cabeza ocupada en una tarea en concreto para encontrar cada pieza y colocarla en el lugar exacto. También afecta a la memoria a corto plazo y memoria visual al tener que buscar piezas específicas, entre muchas otras.
Además, ponen en marcha al cerebro y ayudan a mejorar la capacidad cognitiva en áreas como la atención, el razonamiento y la memoria. Ejercitar la mente con puzles ayuda a prevenir el deterioro cognitivo y puede retrasar los síntomas de la demencia y el Alzheimer.
🤲 Potencia la motricidad fina con sus múltiples piezas de distintos tamaños al tener que encajarlas entre sí. La motricidad fina y su desarrollo sirven para aprender y/o mejorar la escritura.
👀 Desarrolla el razonamiento perceptivo y la discriminación visual teniendo que buscar piezas con patrones concretos, colores o formas que encajen en el lugar exacto y que a la vez les haga crear estrategias mentales de búsqueda y colocación de piezas.
❓ Fomenta la resolución de problemas: Cuando estás armando un puzzle, tomas decisiones, te arriesgas, fallas y lo sigues intentando. Aprendes a no rendirte y a probar distintas formas y planteamientos o trucos para que todo encaje.
En el futuro, esto nos ayuda a ser resolutivos, tener pensamiento crítico y saber resolver inconvenientes que surjan.
🧎♀️ Reducen el estrés y aportan relajación. Terminar un puzle lleva tiempo y trabajo. El tiempo que estamos ocupados haciéndolos nuestro cerebro se activa en modo Alfa, algo similar a lo que ocurre cuando estamos durmiendo. En ese estado tenemos una relajación que mejora nuestro estado de ánimo y que puede disminuir la ansiedad, la tensión y la frecuencia cardiaca
¿Cómo hacer para que les gusten los puzles?
Nosotros nos lanzamos a la piscina y nos hicimos con uno de los grandes, el puzzle La isla misteriosa con 2000 piezas.
Nos encanta el mar y lo que esconde, así que fue un flechazo. Eso sí, no calculamos bien los años que tardaríamos en acabar el cielo con tantas fichas en tonos azules muy parecidos. (En realidad esa parte nos costó entre los dos unos 5 días).

Isla Misteriosa.
Edad: 10 años y +
Nº de piezas: 2000
Tamaño: 96,1 x 68,2 cm
Fabricado en Europa.
Generalmente, los críos pasan etapas en las que les gusta jugar con puzles y rompecabezas, pero es cierto que no siempre tendremos niños dispuestos a hacer puzles, hay ocasiones en las que lo ven algo aburrido y no tienen la iniciativa para armar uno por pequeños que sea. ¿Qué hacemos entonces?
La mejor herramienta es el ejemplo, si un niño te ve leer será más probable que él lea, si te ven disfrutar de la naturaleza, seguramente lo hará también y si te ven hacer puzles se unirán a ti.
Si después de preguntarles si quieren jugar con puzles rechazan la idea, poneros vosotros a jugar con ellos. Elegid puzles para niños que sean aptos para su edad porque lo que queremos es que se unan a nosotros.
A mí me ocurría mientras hacíamos la isla misteriosa que a veces Noah no quería ponerse por pereza, entonces me ponía yo sola y a los pocos minutos ya estaba a mi lado ayudando.
*Tip: ¿Qué hacemos después con el puzle?
Cuando los críos realizan puzles pequeños ni nos planteamos esta cuestión, el puzle se desarma y se mete en la caja para sacarlo otra vez en otro momento. Pero, ¿qué pasa con un puzle de 2000 piezas y 1 m de largo? No sé a vosotros, pero a mí me da mucha pena desarmarlo entero y en este momento no tengo espacio para enmarcarlo y ponerlo en la pared.
En estos casos hay tres trucos que podemos llevar a cabo:
🧩 Se puede dividir en secciones de la misma medida de la caja, separarlas y con mucho cuidado y cartulinas, ir colocándolas en la caja una encima de la otra sin desarmar cada sección.
Cuando queramos sacarlo haremos lo mismo y solo habrá que unir las secciones, esta es una forma apta para puzles que van a ser enmarcados en algún momento.
🧩 Podemos usar un tapiz guarda puzles de forma temporal para llevarlo a enmarcar o hacerlo nosotros mismos. Recomiendo usarlo solo en periodos cortos de tiempo.
Este tapete sirve también mientras lo estamos armando, para no dejarlo en mitad del suelo hasta que lo acabemos, como suelo hacer yo.
🧩 Guardarlo por partes en bolsitas zip. Mi opción favorita cuando quiero volver a hacerlo en otro momento es separarlo en secciones, pero no para guardar en partes hechas, más bien para guardar las piezas sueltas en bolsitas y así volver a armarlo, aunque con una facilidad extra, la de tener catalogadas las piezas.
Hagas lo que hagas, ¡haz un puzle!
Resumiendo, hacer puzles en familia es relajante, divertido y conlleva muchos beneficios para ellos y para nosotros. Además de compartir esos momentos tan valiosos, ejercitamos la mente, fomentamos habilidades sociales, cognitivas y emocionales y nos beneficiamos de todo lo bueno que nos aportan.
Para mí, hacer un puzle es como disfrutar de un buen libro pero en compañía.
¿Os gusta nuestro puzle de Janod?
La verdad es que lo de los puzzles es una gran manera de pasar el tiempo. Mi hija pequeña se aficionó en el confinamiento (tenía tres años) y estuvo un par de años sin parar de hacerlos. Eso sí, al final se cansó y ya no ha vuelto a querer ninguno. Eso sí, llegamos a hacer puzzles de 300 piezas pero siempre de una sentada. Nunca los dejábamos para más de un día y creo que eso fue lo que le hizo aburrirse de ellos.
Qué maravillosa actividad. Yo la disfruté con mis hijos cuanto estaban mas peques y es una buena estimulación para su desarrollo psicomotriz. Una actividad genial para desconectarlos de tanta tecnología.