Decoración para Halloween en Flying Tiger.
No se puede decir que yo haya celebrado Halloween toda la vida porque mentiría. Lo cierto es que solo lo celebro desde que el peque tenía 3 años y empezó a salir disfrazado pidiendo caramelos a los habitantes del pueblo junto a los demás niños. Es lo que tiene la maternidad, que te comes con patatas cada celebración o jolgorio al que tus retoños quieren asistir.
No me puedo quejar eh, la verdad es que tiene su puntillo y últimamente he comenzado también a decorar el negocio y dejar caramelos para que los niños vengan a hacerme el truco o trato.
Eso sí, no me gusta dejarme un dineral en decoración a pesar de que soy de las que la guarda y la reutiliza hasta el fin de los días. Procuro recurrir al reciclaje, manualidades, y tiendas baratas. Y hablando de tiendas baratas, ahí es donde entra Tiger (ahora conocida como Flying Tiger).
Vayamos por partes: En Soria no hay Tiger. Y es una mierda, de verdad. Me enfada mucho porque es una tienda que me encanta y estaría más que dispuesta a dejarme ahí mi sueldo y el de mi marido pero no me lo ponen fácil.
Por suerte tengo amigas que si tienen un Tiger cerca (una en concreto vive encima de uno y creo que desayuna cada día con las dependientas) así que suelo hacer pedidos «online» usando a las amigas. Señores de Tiger, por favor, pongan una bendita tienda online o vengan a Soria.
Buena, bonita, barata.
Sobre todo lo de barato, muy importante eh. Que una no está para gastarse los cuartos en murciélagos y arañas de goma.
Es lo bueno de la tienda, que tiene un montón de mis denominadas «chuminadas» de todo tipo y color por cuatro pesetas y eso de salir de la tienda con una bolsa llena habiendo gastado 20€ mola, ¿a qué si?.
Nosotros hemos elegido una guirnalda con arañas (3€) molonguis con su tela de araña y todo. Un set de 8 bolsas de sangre (2€) para que los vampiros se chuten sus dosis diarias o un set de 8 pajitas negras(2€) con esqueletos que no sobrevivieron al primer día porque mi peque las regaló por todo el cole.
También tenemos una máscara (2€) divina de la muerte que voy a usar yo para que nadie me conozca, un simpático gorro calabaza y unas monísimas zapatillas de monstruo (5€) que llevan un ojo colgando. Yo de pequeña usaba esas zapatillas, me encantaron cuando las vi.
Tenemos unos set de calavera para hacer hielos y en este momento estoy recordando que los dejamos en la nevera y no los he sacado. La cosa es que podríamos haber comprado mil cosas pero es que también cayeron cosas de la sección papelería y ahí si que ya se me van dos sueldos nescafé.

Pero que sepáis que también tenéis vajillas de un solo uso con motivos de calabazas y esqueletos, velas, gorros de bruja, globos fantasmagóricos y un largo etc…
Si tenéis la suerte de tener Tiger cerca, ¡no vayáis, es una trampa! Y si vais, por favor, compradme algo.
¿Te animas a pasar un Halloween de miedo?
Oye, pues tenemos una de estas tiendas en el pueblo ¡tengo que ir a mirar! La niña anda obsesionada con los esqueletos.
Nosotros estuvimos el otro día y compramos unos guantes huesudos para completar el disfraz de mi mayor 😛
Aquí otra mamá que se comió sus palabras sobre esta fiesta importada. Este año, a pedir caramelos!
Nosotros no celebramos Halloween pero molan mucho las cosillas que has puesto…
Estuve el otro día y me llevé varias cositas. Nunca pensé que lo celebraría pero con la llegada de la ratona…, ay amiga! Fiesta con amigos y ahora recorremos la urbanización haciendo truco o tratp
Me encanta! La semana pasada estuvimos por allí y cogimos algunas cosas. Mañana tenemos una merienda terrorífica con los amigos del peque.
Ains no me des envidia que yo no tengo uno cerca 🙂