Gestión de rabietas: La rabieta de Nono.

El cuento que hoy quiero enseñaros trata de algo muy común: Las rabietas y las peleas entre hermanos. Yo no he tenido un niño muy proclive a las rabietas, la verdad, así que cuando se trata de gestión de rabietas soy un poco novata y me pongo nerviosa enseguida. ¡La falta de práctica!.

Aún así, después de haber leído La rabieta de Nono, os lo aconsejo para los que tengáis niños muy pequeños, puede servir de ayuda.

La rabieta de Nono.

la rabieta de nono

Autor: Marie Tibi
Ilustrador: Fabien Öckto Lambert
Editorial: Astronave
Edad recomendada: +3 años

la rabieta de nono

La historia comienza con un enfado, el de Nono cuando su hermana le rompe su libro favorito sin querer.
Nono no acepta que haya sido sin querer, está muy enfadado y quiere vengarse de su pequeña hermana.

Susi, la hermanita de Nono, se pone triste cuando su peluche favorito desaparece. ¿Se dará cuenta Nono del dolor que le está provocando?, ¿Seguirá con su venganza?.

El cuento es todo ternura, desde sus protagonistas que son dos ositos de colores hasta el último punto de la historia.
Cabe destacar el momento en el que las emociones salen, que la ilustración se agranda y cobra más importancia. Durante el cuento todo es del mismo tamaño y se ve en el plano la escena completa pero cuando hay una emoción fuerte como un enfado, tristeza o similar, pasa a un primer plano usando colores más fuertes para enfatizar esa emoción.

He leído alguna critica hacia el hecho de que en el cuento se cite una frase un poco agresiva: Nono tiene ganas de darle un bofetón o de tirarle las orejas. No lo hará, claro, pero está muy enfadado.

la rabieta de nono
Yo pienso que no está mal que salga porque no podemos poner a los niños todo de color de rosa. A ver si me se explicar sin que me matéis:
Muchos niños sienten deseos de pegar a otros niños, algunos por desgracia lo hacen, y el cuento está mostrando que a pesar de las ganas, Nono no lo hace, no pega a nadie. Se contiene y supera esas ganas de maltratar a su hermana.
Podemos usar esa frase para recalcar a los niños la importancia de no recurrir a la violencia y de contenerse como hace Nono, aunque estén muy enfadados.

la rabieta de nono

¿Qué aprendemos del cuento?

A mi me encanta sacar enseñanzas o recursos de los cuentos que leemos, que puedan ayudarnos en la vida real. De La rabieta de Nono también podemos sacar unas cuantas cosillas para enseñar a los peques. Leyendo con ellos los cuentos, comentándolos después, y haciéndoles preguntas para ver si ellos lo han entendido y qué les parece.

Con el cuento vemos que la venganza no es buena y no es la solución a los problemas. También que las mentiras no conducen a nada bueno y que además, siempre sale la verdad. Nos inculca valores como la amistad, la colaboración y el perdón. Nos anima a dejar a un lado la violencia o la agresividad, haciendo ver que es «mala». Nos enseña a buscar la forma de solucionar un problema, recurriendo si es necesario a la amistad, la colaboración, el trabajo en equipo y la solidaridad.

Puedes comprar el cuento en la propia editorial en el link del primer párrafo, en librerías, o en Amazon.

la rabieta de nono

¿Cómo combatimos las rabietas?

A ver, como dije antes el mio no ha sido de rabietas así que no tengo experiencia ni soy la más indicada para dar consejos sobre ellas.
En mi caso yo siempre he sido partidaria de anticiparme y evitar el problema.

Por ejemplo, yo se que si pasamos por xx tienda, va a ver en el escaparate xx juguete y lo va a querer. Pues si puedo, evito pasar o lo distraigo para que no mire.

Otro ejemplo. Tiene un juguete de apego que quiere llevar al parque y se que va a haber problemas cuando no se lo preste a otros niños. Pues trato de que no lo lleve hablando con él y explicándole que estará mejor en casa y así no se le perderá.

Ojo, no hablo de evitar siempre los problemas porque lógicamente tienen que saber también afrontarlos y solucionarlos, pero si que en determinados momentos trato de evitar enfados innecesarios.

Cuando no ha sido así, y se ha enfadado, siempre he adoptado la misma actitud con él, o al menos lo he intentado casi siempre: Me quedo cerca pero sin que vea que le hago excesivo caso a su rabieta. Le hago ver que me importa lo que le pasa, me agacho y le pregunto. Trato de contenerlo pero sin mimar, ni quitar importancia, ni darle demasiada. La justa. Dejo que vea que no está solo, y que le escucharé, pero si llora no puedo entenderlo.
La verdad es que cuando se ha enfadado mucho, le ha durado apenas 2 minutos y luego se le pasa y se olvida (yo le digo en broma que es bipolar) y agradezco no haber pasado esa terrible etapa de rabietas que todo el mundo te augura.

¿Queréis ver más?, Os dejamos nuestro vídeo.

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